martes, 19 de octubre de 2010

Solo Cristo Salva

Solo el Señor puede salvar, pero, ¿Por qué centramos nuestra confianza y depositamos nuestra fe en lo terrenal?, si el único auxilio y salvación viene de Dios!

Recordemos la aclamación de Jonás desde el interior del pez:
“Pero yo con voz de gratitud, te ofreceré sacrificios; cumpliré las promesas que te hice. ¡Solo tuSeñor puedes salvar!” JONAS 2, 9

Hay una parte importante en el fragmento anterior, que es la promesa de Jonás a Dios para adorarle solo a él y reconocer que es el único que lo puede salvar. Y lo podemos ilustrar en elrescate de los mineros chilenos, ¿Quién más que Dios podía salvarlos? ¿Quién más que él con el amor que nos tiene? Es grandioso cuando Dios nos muestra su gloria, bondad y misericordia por nosotros los pecadores y a la misma vez nos hace reflexionar de cómo podemos agradecerle; y no hay mejor manera de agradecer que dando testimonio con nuestra propia vida, viviendo día a día el evangelio y cumpliendo los mandamientos.

Si en algún momento te has sentido vulnerable, afligido o en peligro, téngalo por seguro que hay una persona que no se separa de ti y está ahí en todo momento, él es el único que salva, el que derroto a la muerte en la cruz del calvario para salvarte a ti y a mí, para darnos la vida eterna y que todo en nuestra vida sea felicidad dejando a un lado el sufrimiento.

Dios es el único que salva, en los momentos de duda, tentación, cuando tu fe flaquee, debes hacerte la siguiente pregunta:
¿Quién sería capaz de aceptar morir por mi incondicionalmente, para salvarme y que todos mis pecados sean perdonados, solo porque me ama?

CRISTO!!!

El murió por ti y por mi hace mas de 2 mil años y lo hizo porque te ama, nos ama!!! Lo hizo para perdonarnos nuestros pecados y para que comprendamos que no podemos lograr absolutamente nada si no es a través de él. No podemos vivir en santidad, ni podremos alcanzar la vida eterna si no es a través de él, porque solo él salva.

Escrito por: Melissa Alvarenga


lunes, 11 de octubre de 2010

Un ramillete de Amor para María

¿Cómo podemos definir un ramo de rosas?
Pueden darse muchas definiciones, todas las flores son hermosas, las rosas en particular tienen una belleza extraordinaria que deslumbra a cualquiera. Describimos un ramo de rosas como un conjunto de exquisitas flores de una belleza intensa. Por eso muchas veces nos auxiliamos de ramos de rosas para darlos como obsequios en diferentes ocasiones: aniversarios, natalicios, día de la madre, etc.


También en nuestra oración diaria damos un obsequio similar a nuestra madre santísima: le obsequiamos un ramillete de rosas cuando rezamos el rosario; pero este ramillete es mucho más bello que cualquier otro arreglo con las flores más bellas del planeta. Es un ramillete que viene desde lo más profundo de nuestro corazón. Un ramillete adornado con rosas que han nacido en nuestra alma y que fueron cultivadas con el amor al prójimo y que con gusto le ofrecemos a nuestra madrecita en el Santo Rosario.

Una tarde me tome el tiempo de apreciar detenidamente la belleza de un ramo de rosas y solo me pude imaginar lo bello que es para nuestra madre un ramo de rosas que provenga de nuestro corazón en forma de oración.

En este mes del rosario ofrezcamos a nuestra madre nuestro propio ramillete de rosas, un rosario desde lo más profundo de nuestro corazón, un rosario hecho vida: proclamando la buena nueva de Cristo, haciendo vida su palabra, dando testimonio de sus prodigios.

Que no quede ningún día sin rezarse el rosario, no solo este mes, sino todos los días del año. Regálale ese ramillete a nuestra madre, ese ramillete que más valor tiene, ese que proviene desde tu corazón.

Escrito por: Melissa Alvarenga

martes, 5 de octubre de 2010

Enviame a mi

La delincuencia en la sociedad, la falta de humildad, la desintegración familiar, los desastres naturales, etc. Son aspectos que suceden a nuestro alrededor y lastimosamente cada día nos quejamos que por que mucho llueve que porque hace mucho sol que porque no hacen nada par ayudar a los pobres, que muchadelincuencia etc.

Pero pocos nos hacemos la pregunta más importante y responsable, que ¿hago yo? ¿Cuál es mi aporte para contribuir positivamente? ¿Cómo contribuyo a ser portador de paz? Como cristianos, como católicos, cada vez que nos quejamos de lo que sucede a nuestro alrededor es importante recordar estas preguntas.

Pues son esas preguntas las que nos permiten no olvidarnos esa Misión Personal que el Dios nos ha puesto en nuestra vida y empezando a cumplirla con mi familia, amigos, comunidad, vecinos es decir “nuestro prójimo”.

Muchas veces nos sentimos agobiados por los problemas, el estés, la falta de dinero, trabajo, etc. Nos olvidamos lo que hay a nuestro alrededor pues siempre habrá una persona con mas dificultades que nosotros. Por eso cada vez que nos quejemos de los problemas a nuestro alrededor, recordemos como Isaías le dijo al Señor y digámosle nosotros “Señor heme aquí, envíame a mi”.

“Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí” (Isaías 6,8).

Escrito por: Susana Rocío Mejía García

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